Han pasado 34 jornadas para que el Córdoba agote su crédito. Su derrota ante el Poli y su continuada serie de siete semanas sin ganar le han condenado a verse en zona peligrosa. Los blanquiverdes tienen un calendario durísimo (todos sus adversarios se juegan algo) y una losa mental, que le han llevado a desperdiciar una renta que por noviembre era de ocho puntos.</p